consejos detección de metales

¿Por qué no puedo encontrar nada con mi detector de metales?

5/5 - (1 voto)

Es común regresar con las manos vacías después de una salida de detección de metales, ya sea en los campos o en el bosque. Cinco razones explican esta falta de hallazgos. En primer lugar, el desconocimiento de los ajustes y las sutilezas de su detector puede limitar las posibilidades de éxito. La paciencia y la perseverancia también son esenciales, ya que la búsqueda puede ser ardua y los descubrimientos no son inmediatos ni sistemáticos. Además, adoptar las técnicas correctas de prospección, manteniendo el plato cerca del suelo y evitando movimientos bruscos, debe ser aprendido rápidamente.

A veces, la dificultad del terreno o la presencia de interferencias externas pueden hacer que la prospección sea complicada. Por último, el factor suerte también desempeña un papel importante, y aunque se eviten los obstáculos mencionados anteriormente, pueden ocurrir períodos de mala suerte.

Este artículo responde a las preocupaciones de los aficionados a la detección de metales identificando las posibles dificultades en la búsqueda de objetos perdidos. Al proporcionar consejos prácticos y subrayar la importancia de la perseverancia, nuestro artículo te ayudará a mantenerte enfocado en los pequeños errores que marcarán la diferencia para que tu salida sea un éxito.

No conoces bien tu detector y sus ajustes

Este primer punto trata sobre la importancia de conocer perfectamente tu detector de metales. Cuando una persona compra un detector de metales, suele ver algunos vídeos en YouTube, leer el manual, y piensa que ya sabe todo lo necesario.

Pala y detector de metales en un campo

Sin embargo, esto no es del todo cierto. Llevará varias semanas, incluso meses, familiarizarse con un detector de metales. Es necesario realizar pruebas, escuchar atentamente las señales y ajustar los parámetros según la situación y tus preferencias. Con el tiempo, entenderás mejor cómo manejar tu máquina.

Por lo tanto, date tiempo para aprender.

Eres muy impaciente y lo quieres todo, de inmediato

Hay varios elementos a tener en cuenta aquí.

  • Primero, corres el riesgo de mover el plato del detector de metales demasiado rápido, lo que hará que pierdas algunos sonidos.
  • Segundo, si un campo o una zona de prospección parece poco prometedora, concluyes que la zona ya ha sido prospectada antes o que simplemente no hay nada. Si planeaste una salida de 4 horas y no has cavado nada en la primera hora, quizás pienses, con razón, que estás perdiendo el tiempo.
  • Tercero, acabas de hacer una salida de varias horas y solo has encontrado basura metálica y viejas latas. Regresas a casa, decepcionado, frustrado, y decides tomarte un descanso de la detección, guardando tu equipo por un tiempo.

Todos estos ejemplos no hacen más que mostrar tu falta de paciencia y perseverancia. El consejo es simple: no te rindas antes de tiempo. Controla tus emociones y reflexiona sobre estas situaciones, continúa con tus búsquedas mientras tu estado físico lo permita, y no abandones la prospección tras los primeros fracasos.

¡Habrá muchos otros fracasos! También habrá suerte, eso está garantizado. Una moneda de oro celtíbera puede encontrarse en medio de un campo aparentemente estéril. Solo hace falta que te rindas demasiado pronto para no encontrarla.

No tienes la técnica adecuada de búsqueda

Mueves tu plato demasiado alto sobre el suelo, y al final del barrido, el plato se eleva como el asiento de un columpio. No deberías hacer eso. Mantén el plato lo más cerca del suelo posible y no lo levantes al final del barrido. Escanea el terreno de manera lenta, consistente y regular.

De hecho, hay detectores de metales con un tiempo de respuesta muy rápido, como el Minelab Equinox, el DEUS 2 o la serie Vanquish. Puedes caminar rápido y mover el plato un poco más deprisa sin perder objetivos. Sin embargo, creemos que, aunque los detectores sean bastante reactivos, debes proceder con cautela para maximizar la profundidad de detección.

detector colocado en su pala en un campo de arado con su disco de detección en primer plano

La zona que estás prospectando es difícil o estéril

Un terreno muy mineralizado o lleno de basura metálica es un infierno para detectar. Tu detector emite señales constantemente, y cada sonido se confunde con las interferencias del suelo o incluso con dispositivos cercanos (vías de tren, alarmas, cercas eléctricas). En resumen, estas situaciones te hacen pensar que estás perdiendo el tiempo.

También puedes estar en una zona muy escarpada, basándote en la información que te dio el pastor que te habló de un dato histórico interesante. Pero esa zona está a varias horas a pie, y te preguntas si tanto esfuerzo merece la pena.

En todos estos casos, la respuesta es siempre la misma. Reflexiona y tómate tu tiempo. Nosotros, como prospectores, hemos aprendido con experiencia a considerar que cada permiso es una oportunidad que no debe desaprovecharse. Lo más importante es pasar el detector por cada centímetro cuadrado. Sin eso, es imposible saber si una zona es interesante o no.

Hemos aprendido que una zona prospectada es una zona menos por verificar. Por lo tanto, no es una pérdida de tiempo, sino una duda que hemos despejado. Con esta mentalidad practicarás la detección de metales durante años.

Simplemente fue mala suerte

Es cierto que hay un gran margen para el azar en la detección de metales. Por supuesto, hay fracasos, y son más frecuentes de lo que uno puede imaginar. ¿Cuál es el sentido de salir sin encontrar nada? El mensaje es sencillo: ¡no te rindas! Piensa simplemente que todos estos momentos de fracasos solo harán que tus grandes hallazgos sean aún más valiosos.

Estas son las razones por las que puedes no descubrir nada valioso durante una prospección. He visto que estas razones a veces se solapan. Sin embargo, si evitas los cuatro primeros puntos, el quinto no será tan malo. Y lo más importante, continúa buscando. ¡Nunca te rindas!

Suscríbete a la newsletter para no perderte nuevos artículos

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *