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¿Cómo ganar dinero detectando metales?

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La detección de metales es la mejor forma de aumentar sus ingresos mensuales y, por qué no, ganar dinero e incluso hacerse rico, encontrando un gran tesoro de monedas de oro o lingotes escondidos y olvidados por algún vagabundo. Esa es la vida de un detectorista, ya sea que sea un principiante o una persona con más experiencia.

Un detector de metales le permite buscar tesoros enterrados y olvidados en el suelo. Todos lo sabemos, los buscadores de metales suelen guardar muy bien sus secretos y hallazgos. Y aunque no sea oro, también es posible encontrar objetos antiguos, muy raros, como artefactos celtas o romanos, que pueden ser vendidos en internet a precios muy buenos.

Muchos tesoros son así vendidos por usuarios de detectores de metales en este tráfico de objetos de arte y materiales arqueológicos. No vaya a creer que esto está prohibido, ya que desde hace varias décadas las tiendas de detectores de metales proliferan y nunca han sido objeto de ninguna prohibición por parte de las autoridades públicas.

¡Bueno, seamos serios por 2 segundos!

Casa de cambio de moneda romana encontrada con un detector de metales

Sí, este título es claramente sensacionalista, al igual que el contenido que acaba de leer. Estos son exactamente los argumentos de los anti-detectores. Sepa que esto es realmente lo que piensan los detractores de la detección recreativa, como algunos arqueólogos o incluso colectivos como la asociación APAP (Asociación para la Protección del Patrimonio).

En cuanto a la detección, es un pasatiempo divertido, enriquecedor para la mente y la cultura histórica, pero en lo que respecta a su bolsillo, ¡mejor no hacerse ilusiones!

Una realidad muy alejada de los prejuicios sobre este pasatiempo

La detección de metales genera controversia. Grupos como APAP, respaldados por una parte del Ministerio de Cultura, critican esta práctica. A principios de los años 2000, el comercio de objetos arqueológicos era algo común. Los sitios de venta de segunda mano en línea ofrecían numerosos artículos. Esta situación ha cambiado desde entonces, pero el debate sobre la detección sigue siendo intenso.

Los detectoristas han evolucionado. Ahora denuncian el saqueo y la receptación de objetos arqueológicos. Los vendedores de detectores promueven la protección del patrimonio y la descontaminación metálica de suelos. La realidad de la detección es muy distinta a los prejuicios. En un 97% se trata de recoger basura, no de encontrar tesoros. Estas tiendas merecen nuestro reconocimiento por formar a sus clientes en buenas prácticas y explicar la verdadera naturaleza de este pasatiempo.

Las tiendas de detección de metales son los principales actores en dar a conocer esta afición y explican a sus clientes que será imposible hacerse rico con este pasatiempo.

buscador que detecta a lo largo de un camino rural

La riqueza de la detección está en otro lugar: en el aprendizaje de la Historia, la descontaminación de los suelos, la realización personal al hacer una buena acción y en el enriquecimiento del conocimiento cultural de nuestro país, siempre y cuando las autoridades permitan hacerlo de manera legal. Lo cual no es el caso hoy en día.

También hay que agradecer a todas las asociaciones de detección que han sabido desempeñar su papel en esta desconstrucción, destacando la realidad de su pasión.

La riqueza está en otro lugar

La detección recreativa es mal comprendida. Los detectoristas salvan objetos que podrían ser interesantes para los arqueólogos y limpian los suelos de residuos metálicos. Declaran sus hallazgos a los servicios arqueológicos solo si pueden hacerlo sin correr el riesgo de enfrentarse a un tribunal. A pesar de ello, los medios de comunicación suelen calificarlos de saqueadores de tumbas. Estos apasionados persisten en su afición a pesar de las críticas y los riesgos.

Enriquecerse reciclando

No estamos aquí para compadecerlos. Porque la detección, a través de estas dificultades, permite igualmente ganar un poco de dinero mientras se limpia el planeta.

97% de residuos metálicos, eso es bastante. Entre el cobre, el hierro, el plomo, el aluminio, todos estos residuos recogidos de los campos de cultivo, los bosques o las playas pueden ser entregados y vendidos a ciertos chatarreros.

Conjunto de basura metálica encontrada con un detector de metales.

Así que sí, será necesario recoger una gran cantidad de residuos para empezar a tener una suma considerable, pero es el único medio para dar valor económica y moralmente a su prospección.

Preste atención a un detalle: será necesario separar los residuos por tipo de metal, ya que cada metal tiene su propio precio en el mercado : el hierro con el hierro, el plomo con el plomo y el aluminio con el aluminio. Es la mejor forma de dar valor a su buena acción.

La detección es, ante todo, descontaminación metálica y el placer de disfrutar del aire libre. Sepa también que la búsqueda de oro y la pesca con imán pueden entrar en este círculo virtuoso de la ecología. Y si encuentra un objeto de interés arqueológico, piense en declararlo o en contactar con asociaciones o tiendas para pedir asesoramiento.

Y si de verdad desea ganarse la vida con la detección de metales, abra, sencillamente, una tienda de venta de equipos de detección.

Atención: Este artículo no es una crítica al trabajo de los arqueólogos. Hacen una labor admirable de investigación, extracción, identificación y contextualización de hallazgos arqueológicos en condiciones muy difíciles, tanto por la falta de personal como por la presión que tienen para realizar este minucioso trabajo. Les expresamos todo nuestro apoyo, en nombre del equipo de redacción, para que encuentren todos los tesoros de nuestro país.

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