¿Cómo solicitar autorización a un propietario para poder detectar?
La detección de metales requiere caminar por diversos terrenos. Cuanto más pase el detector sobre una mayor superficie, más probabilidades habrá de encontrar objetos interesantes. Es simplemente una cuestión matemática. Pero, lamentablemente, para hacer esto, es necesario hablar con los propietarios y pedirles permiso para acceder a sus terrenos. Este paso es obligatorio según la ley sobre el uso de detectores de metales en España.
En España, no se puede realizar la detección como actividad recreativa sin el permiso del propietario del terreno donde se desea detectar, ni sin un motivo legal, como la búsqueda de objetos perdidos, restos agrícolas enterrados o la eliminación de contaminación metálica.
Es totalmente inconcebible empezar a excavar sin haber solicitado previamente el permiso del propietario. Esto sería una falta de respeto y, sobre todo, una falta de civismo hacia esta afición. La detección no es saqueo, y es importante de demostrar responsabilidad. Aunque existen algunos lugares donde no se requieren trámites, siempre se comienza pidiendo autorización para detectar en una propiedad privada. Pedir permiso al propietario es la mejor manera de respetar un cierto código ético y asegurarse de no estar en un sitio arqueológico. De hecho, el propietario suele conocer bien lo que hay en su terreno.
Según la personalidad de cada uno, este ejercicio puede parecer complicado. Entre quienes no se atreven y quienes temen el rechazo, en este artículo descubrirá consejos que le ayudarán a obtener el permiso para realizar una prospección recreativa y sin objetivos específicos.
¿Tiene miedo de pedir permiso?
Pedir permiso para detectar en propiedad ajena puede ser intimidante si nunca se ha hecho antes, pero la conversación se vuelve más fácil con la práctica. En resumen, cuanto más se pida, más fácil será hacerlo.
Verá que siempre habrá personas que digan que sí y otras que digan que no. Es así, y hay que acostumbrarse. Algunos propietarios rechazarán su solicitud sin importar lo que diga, pero no permita que esto le desanime: es algo común.
Obtener el permiso para detectar en propiedades privadas requiere habilidades de persuasión y práctica. La forma en que se presente es clave. Como en todo en la vida, la primera impresión siempre cuenta.
La confianza en uno mismo es la base de todo
La primera vez será inevitablemente nerviosa, así que sea amable y seguro de sí mismo, manteniendo un tono breve, claro y respetuoso. Después de llamar a la puerta, quítese las gafas de sol (si las lleva) y dé dos pasos hacia atrás. No se coloque demasiado cerca de la puerta.
Preséntese al propietario con su nombre y explique el motivo de su visita. Si pertenece a una asociación o federación, puede mencionarlo para generar confianza. Al fin y al cabo, solo desea pasear por un terreno, no hay nada grave (los cazadores también lo hacen sin pedir permiso a nadie).
Elija bien sus palabras
Lo que diga al propietario es importante, pero no debe dar la impresión de ser un vendedor de puerta en puerta. Preséntese de manera sencilla y explique que la detección de metales es su afición de fin de semana. Dígales que está buscando objetos perdidos, sin entrar en demasiados detalles. Finalmente, pregúntele si puede detectar en uno de sus terrenos. ¡Así de sencillo!
Técnicamente, la conversación siempre tiene dos fases:
- La fase de acercamiento y contacto inicial
- La fase de información
La fase de acercamiento y contacto inicial
La fase de acercamiento es la primera frase que pronuncia al hacer su solicitud. Es fundamental para causar una buena impresión. Debe ser breve, directa y cortés. Aquí tiene una frase modelo para su solicitud:
“Hola, disculpe que le moleste. Practico la detección con un detector de metales y quisiera saber si sería posible pasear por alguno de sus terrenos durante unas horas, por favor.”
¡Eso es todo! No necesita decir más en este primer acercamiento. Es importante usar un tono relajado al decir esta frase para mostrar que su solicitud es algo normal y común para usted.
Si la respuesta es un “no” categórico, tiene dos opciones:
- Aceptarlo y buscar otro permiso en otro lugar.
- Intentar entender la razón de su negativa y tratar de convencerlo.
La fase de información
Ya sea que la respuesta sea positiva o negativa, debería aparecer una segunda parte. Esa parte en la que el propietario busca saber más sobre lo que va a hacer. Según la forma en que el propietario le hable, podrá evaluar si está interesado en su afición o si no le importa en absoluto.
Sea cual sea el caso, hay una regla que prevalece: diga lo menos posible sin dar demasiados detalles, evitando así entrar en demasiadas explicaciones.
Es aquí donde debe incorporar rápidamente lo siguiente. También hay palabras prohibidas si decide adaptar un poco la frase o si la conversación continúa:
- Tesoro
- cavar
- pala
- moneda
- y todo el vocabulario técnico de nuestra afición
El propietario puede hacerle preguntas sobre su experiencia personal o sobre su afición, queriendo saber qué encuentra habitualmente. Todo esto es positivo para su objetivo, siempre que respete las palabras prohibidas. Usted practica la detección, ante todo, para disfrutar del aire libre y despejarse la mente.
La mayoría de las monedas que descubrirá con su detector de metales no valen mucho más que su valor nominal, pero el propietario no tiene idea de esto. Si le dice que busca monedas raras y tesoros, creerá que su terreno está lleno de objetos valiosos, lo que generalmente no es cierto.
La gente le preguntará cómo recupera los objetos perdidos. Sin embargo, no les diga que cava agujeros o que usa una pala. Explique más bien que utiliza un pequeño pico o incluso una pala de jardín. Para la primera solicitud que haga a este propietario, use una pequeña pala en lugar de una grande con un mango de un metro de longitud.
El objetivo es no asustar innecesariamente al propietario y garantizarle que su impacto en el terreno será mínimo.
Sin embargo, si la conversación avanza bien y su solicitud es aceptada, al menos deberá conocer el nombre del propietario y, por qué no, pedirle su número de teléfono. Lo ideal sería notificar su solicitud por escrito.
No dude en investigar la historia del lugar que va a prospectar. Averigüe si otros detectores han pasado por allí antes que usted, si hay algún río cerca del campo en cuestión y, ya que está, infórmese sobre los otros terrenos que posee el propietario (apóyese en el catastro). Esto le proporcionará una mina de información y, sobre todo, ampliará su «área de acción» para el futuro.
Otro punto muy importante: si encuentra un hallazgo arqueológico, no es usted quien debe hacer la declaración, sino el propietario. Por el contrario, no informe a los servicios arqueológicos sobre un objeto encontrado en una parcela si el propietario se opone o no está informado de su iniciativa.
Reúnase siempre con el propietario en persona
Solicitar permiso al propietario en persona es la mejor manera de obtener su autorización. Olvídese de los correos electrónicos o las llamadas telefónicas, ya que raramente funcionan. Para que alguien le otorgue una autorización, querrá conocerlo y hacerse una idea de quién es usted.
Por ejemplo, la experiencia le mostrará que hacer su solicitud cuando el propietario está afuera, en su jardín o trabajando en su campo con su tractor, da mejores resultados, especialmente si lo encuentra durante la cosecha o mientras está preparando su campo en septiembre u octubre.
Es en ese momento cuando el campo ya no está en producción. Por el contrario, si va durante el sembrado, seguramente recibirá un rechazo, salvo que sea para la próxima temporada …
Factores que favorecen una autorización o no
Los propietarios suelen ser agricultores, generalmente de cierta edad. Vaya usando botas. Parece algo simple, pero un agricultor siempre trabaja con botas. Adoptar su código de vestimenta laboral será una ventaja (¡es cierto!) para obtener su autorización.
Nunca pida autorización yendo en grupo, ya que esto podría dar la impresión de que va a remover todo su campo. Por el contrario, si va con su hijo, causará una impresión positiva y proyectará una imagen paternalista (o maternalista) y transgeneracional de su afición.
Si usted es una mujer detectorista, tiene una gran ventaja. La agricultura es un mundo muy masculino en general, y ver a una mujer prospectando puede suavizar un poco las conversaciones.
Además, si pide la autorización a la esposa del propietario, en la mitad de los casos, ella le pedirá que hable con su marido. Aunque a veces ella puede dar su autorización, por lo general, le pedirá consultar con su marido.
¿Quieren los propietarios quedarse con sus hallazgos?
Técnicamente, si encuentra algo, usted es el descubridor de ese hallazgo. El descubridor es la persona que encuentra un objeto. En caso de descubrimiento, todos los hallazgos deben compartirse entre usted y el propietario. Por lo tanto, es recomendable presentar sus hallazgos, incluso los residuos, al propietario.
Es su responsabilidad establecer un contrato con el propietario antes de detectar en su propiedad. Es posible que los propietarios deseen conservar sus hallazgos, pero es un riesgo que debe aceptar cuando detecta metales en una propiedad privada. Es una buena idea tener una estrategia sobre cómo compartir sus hallazgos con el propietario si resulta necesario.
Sin embargo, para tranquilizarlo, generalmente le dejarán quedarse con todo. Si eso ocurre, deje un pequeño recuerdo de su paso. No olvide, si es posible, notificar su solicitud de autorización por escrito.
Ejemplo de solicitud de autorización en forma de formulario escrito
Autorización para la prospección con un detector de metales en un terreno privado con el único propósito de buscar uno o varios objetos perdidos por el propietario o el explotador de la parcela.
Yo, el abajo firmante, Don o Doña (nombre del propietario), autorizo a Don o Doña (nombre del prospector) a utilizar su detector de metales en los siguientes terrenos (indicar las parcelas donde el propietario permite la prospección), con el objetivo de buscar uno o varios objetos perdidos de naturaleza metálica como motivo legal.
Declaro en mi nombre (nombre del prospector) que realizo esta búsqueda únicamente con fines recreativos. Todos los hallazgos realizados serán presentados al propietario, quien podrá, a su discreción, decidir qué desea conservar.
Me comprometo, como Don (nombre del prospector), a retirar todos los desechos metálicos u otros que pueda encontrar, a restaurar cualquier agujero que pueda haber hecho para desenterrar objetos (siempre y cuando no excave más de 20 cm de profundidad). De acuerdo con la legislación que regula el código del patrimonio, también estoy obligado, con el consentimiento del propietario, a declarar cualquier hallazgo que pueda interesar a la Historia y la Arqueología ante los servicios competentes.
Asimismo, me comprometo a informar sobre cualquier anomalía relacionada con un problema ambiental (contaminación, vertederos ilegales) al propietario y/o a los servicios competentes.
Hecho en (nombre del municipio), el (fecha de la solicitud de autorización)
Firma: (Don o Doña el prospector y el propietario)
